El hummus es un paté vegetal fácil de hacer en casa, y en esta receta te voy a enseñar una manera rica y nutritiva de hacerlo para un desayuno o almuerzo óptimo.
En la siguiente entrada os voy a explicar los beneficios del hummus a través de la alimentación energética China y compartir una receta de cómo conseguir la mejor textura y gusto.
Qué es la alimentación energética China
La alimentación energética China estructura la dieta según el efecto de los alimentos y no su contenido. Entiende que no existe una dieta que sea buena para toda persona porque siendo diferentes, tenemos diferentes necesidades, y busca crear vitalidad usando las cualidades específicas de cada ingrediente.
Esto lo hace clasificando los alimentos a través de la reacción que causan en nuestro cuerpo según el sabor que tienen, la naturaleza o efecto, y el tropismo, o donde actúan. Hay alimentos que enfrían, cómo la sandía, o calientan, cómo la canela, que relajan, cómo la manzanilla, que aceleran, cómo el chile picante, que humedecen, cómo la pera, y que secan, cómo el jengibre.
Está manera de entender los alimentos ayuda a que escogemos los que nos convienen dependiendo de nuestro estado y de la actividad que vamos a realizar, tomando en cuenta los valores más allá de los contenidos de los alimentos.
Aspectos energéticos del hummus
El hummus es un paté vegetal que se puede comer acompañando un plato, o encima de tostadas, o cómo dip para verduras. Es un alimento común en los países de oriente medio, donde cada sitio y casa tienen su elaboración y gusto único. Hummus en árabe, significa garbanzo, y se dice que proviene de Egipcio donde su primera mención se encuentra en un recetario del siglo 13.
Según la alimentación energética china, el hummus tonifica y moviliza la energía, y también humedece la sequedad y a desbloquear los estancamientos. Todas estas acciones tienen un efecto beneficioso para la digestión, mejorando así la asimilación de la nutrición contenida en ellos. Es excelente cuando estamos cansadas, o si sabemos que vamos a hacer un esfuerzo que requiere un aporte energético potente, o simplemente para mantener la vitalidad requerida con una actividad normal. No es adecuado en momentos sedentarios porque nos llenará de energía que no usaremos.
Vamos a mirar en detalle los aspectos energéticos de cada uno de los ingredientes en está receta de hummus:
Sésamo amarillo o negro
Las semillas de sésamo son de sabor dulce y naturaleza neutra, contienen energía que entra en los canales de los elementos Madera y Agua. Tienen la función específica de humedecer las vísceras, nutrir la sangre, y ayudan a prevenir el encanecimiento precoz del pelo. A nivel nutritivo, nos proveen de omega 3 y 6, y son una excelente fuente de calcio.
Aceite de oliva primera presión en frío
El aceite de oliva tiene sabor dulce y amargo, y naturaleza neutra. Tiene una acción astringente que humedece y repone los líquidos en el cuerpo, siendo bueno su consumo cuando hay sequedad. Contiene entre otras cosas, ácido linoleico, vitamina E y vitamina A, componentes que mejoran la circulación sanguínea.
Garbanzos
Los garbanzos son de sabor dulce y naturaleza neutra, y son considerados entre los mejores alimentos para equilibrar el elemento Tierra. Tonifican y consolidan la energía, ayudando a estabilizar el ansia por comer, tanto la física cómo la emocional, convirtiéndolos en un alimento que sacia y nutre a la vez. Están llenos de proteína, fibra, vitamina B6, y manganeso, ingredientes esenciales para el sistema nervioso.
Zumo de limón recién exprimido
El limón tiene sabor ácido y amargo, y naturaleza fresca, y tiene un efecto importante sobre la circulación de la sangre. Su sabor moviliza la bilis, liberando obstrucciones del hígado, mientras que su acción astringente promueve el movimiento de los líquidos en el cuerpo y mejora la sequedad. El limón contiene ácido cítrico, Calcio, Magnesio, y vitamina C, considerados importante para el sistema inmunológico y el equilibrio de los electrolitos.
Ajo
El ajo tiene sabor picante, dulce, y salado, y naturaleza caliente, capaz de despertar la circulación y dispersar las acumulaciones. Genera calor en el cuerpo, ayudando a mejorar el frío estomacal que a veces se presenta con sensación de distensión y plenitud. Es un aliado en la prevención de enfermedades porque estimula las defensas naturales del cuerpo y elimina las toxinas. El ajo contienen Vitamina A, Vitamina C y Vitamina B-9, Potasio, Calcio o Fósforo.
Resumen
Vemos entonces que el Hummus es excelente fuente nutricional, a la vez que crea las condiciones para que el sistema digestivo funcione mejor porque calienta el estómago y mejora la circulación.
Receta Hummus con sésamo negro
El hummus preparado en casa con nuestro tiempo, amor, y productos frescos, está lleno de vitalidad y nos nutre profundamente.
Ingredientes:
- 80 ml aceite oliva virgen extra
- 400 gramos garbanzo en bote o cocinado en casa 1 limón, su zumo recién exprimido
- 1-2 dientes ajo, pelados y aplastados
- 60 gramos semillas sésamo negro (o blanco)
- 80 ml agua
- sal a gusto
- perejil picado, pimentón dulce, aceite oliva
Proceso:
- Comenzamos tostando el sésamo durante 3 minutos en una sartén, removiendo continuamente. Apagamos el fuego y dejamos que las semillas se enfríen antes de triturarlas durante 3 minutos con un moledor de café o mini beamer, hasta conseguir un polvo homogéneo.
- En una batidora o con mini beamer, batimos durante 1 minuto el zumo de limón, el ajo, el agua, el aceite y el sésamo previamente triturado. Comenzar con estos ingredientes y mezclarlos bien antes de añadir los otros hace que el hummus resulte mucho más cremoso.
- Escurrimos los garbanzos para eliminar el líquido con el cual fueron cocinados y añadimos solamente un puñado a la mezcla. Batimos durante 1 minuto hasta conseguir una textura homogénea muy líquida.
- Añadimos el resto de garbanzos poco a poco hasta conseguir la textura deseada.
- Dejamos reposar durante 1 hora (mínimo) y corregimos el sabor añadiendo sal, aceite o sésamo triturado a tu gusto.
- Al servir el plato, lo adornamos con pimentón dulce, perejil picado y un chorro de aceite de oliva. Servir con tostadas de pan de buena calidad, con verdura picada, o con tortitas de arroz.